USO RACIONAL DEL AGUA EN EL RIEGO

El agua, recurso fundamental para la vida en nuestro planeta, es un elemento clave y esencial en el ámbito agrícola, donde su uso eficiente y racional se vuelve imperativo. La agricultura, siendo uno de los principales consumidores de agua a nivel global, enfrenta el desafío de equilibrar la necesidad de producir alimentos con la preservación de este recurso vital. Es en este escenario donde cobra relevancia el uso responsable del agua en el riego agrícola.

La irrigación es un pilar fundamental en la producción de alimentos, permitiendo el crecimiento óptimo de cultivos en áreas donde la precipitación natural resulta insuficiente para satisfacer las necesidades hídricas de las plantas. Sin embargo, el riego ineficiente o excesivo puede conllevar a la sobreexplotación de los recursos hídricos, agotando acuíferos subterráneos y disminuyendo la disponibilidad de agua dulce.

Para lograr un uso sostenible del agua en la agricultura, es fundamental adoptar prácticas y tecnologías que promuevan la eficiencia hídrica. La implementación de sistemas de riego inteligentes, como el riego por goteo o la microaspersión, reduce significativamente las pérdidas por evaporación y permite una distribución precisa del agua a las raíces de las plantas, maximizando su absorción y minimizando el desperdicio.

Además, estrategias como el manejo adecuado del suelo, la rotación de cultivos y la aplicación de técnicas de conservación de agua contribuyen a mejorar la retención de humedad en el suelo, reduciendo la necesidad de riego y preservando la calidad del agua disponible.

RIEGO INTELIGENTE Y SOSTENIBLE

La adopción de prácticas de riego inteligentes y sostenibles no solo beneficia al medio ambiente al preservar los recursos hídricos, sino que también resulta en una mayor rentabilidad para los agricultores y regantes. La optimización del uso del agua reduce los costes de producción, aumenta la productividad de los cultivos y fortalece la resiliencia de las explotaciones agrícolas frente a condiciones climáticas adversas, contribuyendo así a la seguridad alimentaria.

De este modo, es importante destacar que, desde la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana (Fecoreva) y las diferentes entidades de riego que la forman, se están fomentando políticas y programas que promuevan la capacitación de agricultores en técnicas de riego eficiente, así como el acceso a tecnologías innovadoras y recursos financieros para su implementación. La colaboración entre gobiernos, organizaciones no gubernamentales, científicos y el sector privado es esencial para conseguir la adopción generalizada de prácticas agrícolas sostenibles que garanticen la conservación del agua para las generaciones futuras.

En conclusión, el uso racional del agua en el riego agrícola no solo es una necesidad para preservar este recurso finito, sino que también es un pilar fundamental para la sostenibilidad y la seguridad alimentaria. El compromiso colectivo en la implementación de técnicas de riego eficientes y sostenibles es crucial para garantizar un equilibrio entre la producción agrícola y la preservación de los recursos hídricos, asegurando un futuro próspero y sostenible para el sector agrícola y el planeta en su conjunto.