LOS REGANTES DEL TURIA SE COMPROMETEN CON LA SITUACIÓN DE ESCASEZ DE AGUA

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El 6 de agosto de 2024, la Confederación Hidrográfica del Júcar celebró una sesión extraordinaria de la Comisión de Desembalse de la sección del río Turia, con el objetivo de analizar la situación hidrológica actual y valorar la posible adopción de restricciones para el uso agrícola, tal y como establece el Plan Especial de Sequía (PES), vistas las previsiones meteorológicas establecidas por AEMET de cara al otoño.

La Comisión de Desembalse, según el artículo 46.1 del Real Decreto 927/1988, de 9 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de la Administración Pública del Agua y de la Planificación Hidrológica, ha de celebrar una sesión ordinaria durante la primavera con el objeto de definir los programas de desembalse de cara a la campaña estival de riegos, vistas las necesidades ambientales y las de los usuarios, y en función de la situación de los recursos disponibles en los embalses y en cumplimiento de los resguardos estacionales mensuales, en previsión de futuras avenidas, establecidos en las normas de explotación de dichos embalses.

En el caso de la sección del río Turia, la reunión convocada es la tercera que se celebra desde el pasado mes de marzo, cuando se celebró la primera y se decidió posponer las conclusiones, a la espera de posibles precipitaciones, para mayo. Entonces, se hizo un llamamiento a los usuarios en orden a la adopción de medidas voluntarias de ahorro, en previsión de un empeoramiento en las condiciones de sequía, a los que se emplazó al mes de agosto para analizar, una vez más, la situación hídrica del sistema y decidir sobre la adopción de las medidas que pudieran resultar pertinentes. “Los indicadores de sequía y escasez nos decían que, si no llegaban las precipitaciones, era muy probable que el sistema Turia entrara en prealerta en el mes de julio y, tal como establece el PES, habría que adoptar restricciones», comentó el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Miguel Polo, en una rueda de prensa celebrada tras la Comisión.

Las previsiones se han acabado cumpliendo y este lunes el Informe de Seguimiento de la Sequía y Escasez de julio, que publica el Organismo mensualmente, recogía el cambio en la unidad territorial del Turia, que pasaba de normalidad a prealerta. La situación, además, es preocupante en gran parte de la Demarcación, ya que ocho unidades territoriales se encuentran en una situación de sequía prolongada: Cenia-Maestrazgo, Mijares-Plana de Castellón, Palancia-Los Valles, Bajo Júcar, Serpis, Marina Alta, Marina Baja y Vinalopó-Alacantí. Por otra parte, cuatro unidades territoriales están, en cuanto a escasez, en un escenario de emergencia (Cenia-Maestrazgo, Palancia-Los Valles, Marina Baja y Marina Alta), mientras que otras tres están en alerta (Mijares-Plana de Castellón, Serpis y Vinalopó-Alacantí).

Por el momento, sólo el sistema Júcar continúa con valores de normalidad, tanto en cuanto a los indicadores de sequía prolongada como a los de escasez. El informe completo de indicadores puede consultarse a través del siguiente enlace: InformeSequia.pdf (chj.es)

RESTRICCIONES PARA EL REGADÍO

​Durante la sesión de la Comisión se informó a los miembros sobre la evolución y situación pluviométrica e hidrológica actual, que, ante la falta casi generalizada de lluvias durante los últimos meses, coloca la precipitación media en la Demarcación correspondiente al presente año hidrológico, en el periodo transcurrido hasta el 5 de agosto, en 257 mm. Se trata del cuarto valor más bajo de la serie histórica de los últimos 33 años, muy por debajo de los 376 de precipitación media acumulada, y que incluso es de los años más secos en zonas como la parte baja del Turia o las cuencas del Palancia y del Cenia.

Una escasez de precipitaciones que, unida a las altas temperaturas y al aumento de las demandas de riego, se ha traducido en una merma del volumen embalsado en la cuenca en 1.306 hm3 (46% de la capacidad total). En el caso del sistema Turia, el agua almacenada en los principales embalses, Benagéber y Loriguilla, se encuentra por debajo de la media de los últimos 5, 10 y 20 años, con alrededor de 111 hm3 (38%).

La Comisión aprobó, por tanto, establecer, con carácter general y de acuerdo con lo que establece el PES para un escenario de prealerta, una reducción sobre los caudales superficiales regulados a suministrar para uso agrícola del 15% sobre sus derechos concesionales; reducción que es del 20% para el caso de los regadíos mixtos del Canal principal del Camp de Túria, ya que estos disponen de importantes derechos de aprovechamiento de aguas subterráneas que complementan las aguas superficiales. “Desde la Confederación agradecemos enormemente la colaboración de todos los usuarios y les agradecemos que hayan aceptado ir al máximo de las restricciones», comentó Polo.

Por su parte, el presidente del Sindicato de Regulación de las Aguas del Turia y de la Comunidad de Regantes de Llíria, José Alfonso Soria, subrayó el compromiso de los regantes ante la situación de sequía y las malas previsiones climatológicas, que estiman un otoño poco lluvioso. “Nos solidarizamos con esta situación de escasez y de sequía, y nos vemos en la necesidad de aportar nuestro granito a través de estas restricciones que, además, van a permitir que haya más agua para el abastecimiento urbano», indicó.

Sobre este asunto, el presidente de la Confederación recordó que el paso del sistema Turia a situación de prealerta por escasez no implica restricciones para el uso urbano, aunque sí un cambio importante para el abastecimiento de toda el área metropolitana de Valencia. “Habitualmente un 75% de esta agua proviene del Júcar y un 25 del Turia. A partir de hoy, tal y como se establece en el PES, estos porcentajes cambian y van a ser de un 80% del Júcar y un 20 del Turia», explicó Polo, quien remarcó que esta medida, junto con las restricciones, “permitirán ahorrar en los próximos dos meses alrededor de 10 hmen el sistema».