LA C.R. LA VALL DE CÀRCER I SELLENT INSTALA PLACAS FOTOVOLTAICAS

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La Comunidad de Regantes La Vall de Càrcer i Sellent ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad con la instalación de placas fotovoltaicas, un proyecto innovador y eco-amigable cuyos objetivos principales son ahorrar costes a sus comuneros, reducir la dependencia de fuentes de energía no renovables y promover el uso de energías limpias.

El coste total del proyecto asciende a 700.000 euros, una inversión considerable que refleja el compromiso de la comunidad con la transición hacia energías más sostenibles. Sin embargo, gracias al apoyo financiero proporcionado por la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca, la carga económica para la comunidad de regantes se reduce de manera significativa. La Conselleria financia el 70% del coste total, lo que equivale a unos 500.000 euros. Esto significa que la comunidad cubre 200.000 euros, aproximadamente, del coste total del proyecto.

BENEFICIOS ECONÓMICOS Y AMBIENTALES

La instalación de placas fotovoltaicas no solo es una medida medioambiental, sino que también conlleva importantes beneficios económicos a largo plazo:

1. Reducción de costes energéticos: Con la implementación de esta tecnología, la comunidad podrá generar energía, lo que se traduce en un ahorro considerable en la factura eléctrica. Esto es especialmente relevante para las actividades de riego, que suelen tener un alto consumo energético.

2. Cierta autonomía energética: La capacidad de generar energía propia proporciona una mayor autonomía y menos dependencia de las fluctuaciones de los precios del mercado eléctrico.

3. Impacto ambiental: Al reducir el uso de combustibles fósiles, la comunidad contribuirá a la disminución de emisiones de gases de efecto invernadero, ayudando así a mitigar el cambio climático y promoviendo un entorno más limpio y saludable.

4. Sostenibilidad a largo plazo. Este tipo de inversiones son cruciales para la sostenibilidad a largo plazo de las actividades agrícolas y de riego, asegurando que estas prácticas puedan continuar sin perjudicar el medio ambiente.

La instalación de placas fotovoltaicas en la Comunidad de Regantes de La Vall de Càrcer i Sellent representa un ejemplo destacado de cómo la colaboración entre entidades públicas y comunidades locales puede dar lugar a proyectos sostenibles y económicamente viables. Este proyecto se convierte en un referente de innovación y responsabilidad medioambiental en el ámbito agrícola. La apuesta por la energía solar no solo beneficiará a los regantes de hoy, sino que también sentará las bases para un futuro más limpio y sostenible para las próximas generaciones.